En mi opinión, estos dos exámenes han adquirido demasiada trascendencia, y son la causa de estrés, tristeza y depresión en las personas que no logran conseguir el resultado anhelado. Cuando mis estudiantes llegan buscando prepararse para estos, la primera pregunta que tienen en mente está relacionada con saber cuál examen presentar en caso de tener la opción de elegir entre el IELTS o el TOEFL.La verdad, son muchos los factores que influyen en esta decisión.

Entonces, ¿Cuál examen te conviene tomar?

EL TOEFL

El TOEFL es el acrónimo para Test of English as a Foreign Language (Examen de inglés como idioma extranjero). Es un examen que fue ofrecido por primera vez en 1964, y es producido por la empresa ETS (Educational Testing Services), con casa matriz en Princeton, Nueva Jersey. Esta empresa diseña e implementa exámenes estandarizados para la educación, entre otros el TOEIC y las diferentes versiones del GRE.

El TOEFL es la prueba estandarizada de inglés americano por excelencia y es requerido por las universidades en Estados Unidos para poder ser aceptado a programas de pregrado y posgrado. El examen está dividido en cuatro secciones:

  • Reading: Comprensión lectora.
  • Listening: Comprensión auditiva
  • Speaking: Expresión oral.
  • Writing: Expresión escrita.

El puntaje total es de 120 puntos, de manera que cada sección tiene un peso de 30 puntos.

En su totalidad, el examen tiene una duración de casi cuatro horas. Se inicia con las secciones de comprensión lectora y comprensión auditiva, que tardan 60 minutos cada una. Tras un descanso de 10 minutos, debes realizar la sección de expresión oral, que toma alrededor de 20 minutos, y cierras el TOEFL con la sección de expresión escrita, cuya duración es de 50 minutos.

Debo decir que no es un examen fácil.

El TOEFL es una prueba que exige una gran resistencia mental y física y, obviamente, un buen dominio del inglés. Además, como el resultado tiene implicaciones profesionales y personales, los candidatos terminan exhaustos a causa de los nervios y de la alta exigencia en términos de concentración.

La clave está en tener una buena estrategia para poder responder a las diferentes secciones que lo componen.

Yo les digo a mis alumnos que piensen que este examen es como una carrera de obstáculos, o un recorrido a través de un bosque, y que juntos vamos a estudiar el mapa que nos permitirá cruzar y superar todas las pruebas que se nos aparezcan.

Con los años, he comprobado que, entre mejor se conoce el examen, mejor es el resultado. Mis cursos de preparación para el TOEFL hacen énfasis en conocer el examen de la A a la Z, manejar los tiempos, y estar preparado para cualquier eventualidad.

¿Cuál es el recorrido exacto en esta prueba?

I. Reading: comprensión lectora.

Esta es la primera parte del examen si tomas el iBT, que es lo que se conoce como el Internet Based Test, el que más se ofrece en los países latinoaméricanos. Como señalé antes, esta sección dura 60 minutos y consiste de tres lecturas. El presupuesto de tiempo para cada una debe de ser de 20 minutos aproximadamente. Los temas son académicos (recuerda que es un examen preuniversitario) y pueden tratar temáticas que abarcan desde arte hasta zoología. Sin embargo, no es necesario ser un experto en esos temas para responder la prueba, ya que las lecturas son utilizadas simplemente como un medio para evaluar tu nivel real de comprensión del inglés.

Cada lectura consta de alrededor de 14 preguntas, para dar un total de entre 36 a 42 preguntas. El estilo de todas estas preguntas es de selección múltiple, y comprenden vocabulario en contexto, preguntas retóricas sobre la lectura, inferencias sobre el texto y síntesis.

Sorpresa: ¡Tienes un texto extra!


Los amigos del ETS han decidido experimentar el diseño de sus pruebas con nosotros. Es por esto que en cada prueba existe la posibilidad de que tengas una lectura comodín. Ellos ensayan lecturas para ser utilizadas en otros exámenes; buscan verificar que esta sea lo suficientemente compleja –pero no imposible– como para retar a los estudiantes, y que el nivel de las preguntas corresponda al de la lectura.


¿Qué significa eso?

Que en vez de 3 lecturas vas a tener que hacer 4, de manera que tendrás que responder hasta 56 preguntas. Además, la sección va a durar 80 en vez de 60 minutos. El ejercicio, obviamente, demanda más de ti, tanto mental como físicamente, y lo peor (o mejor) de todo es que no sabes cuál de las lecturas es la experimental. Por lo tanto, tienes que responder las 4 como si en cada una estuviera en juego la medalla olímpica, con igual nivel de concentración y sin dar ventajas.


II. Listening: comprensión auditiva.

La sección de comprensión auditiva se compone de 6 pruebas. Puedes tener que escuchar de 2 a 3 diálogos entre estudiantes, ciertas conversaciones en salas de clase, y algunas clases magistrales o conferencias sobre un tema académico (que, nuevamente, puede ser de cualquier disciplina: economía, sociología, música, etc). En muchas de estas clases magistrales hay algún tipo de interacción con los alumnos.


La prueba dura 60 minutos y las preguntas, a las que tendrás que responder después de escuchar cada audio, son todas de selección múltiple. Aunque tienes un reloj en la pantalla del computador, debes controlar cuánto te demoras por pregunta, ya que no puedes quedarte sin tiempo para el resto de las pruebas de comprensión auditiva (recuerda que son seis).


Lo más importante, sin embargo, es que tomes buenas notas conforme vas escuchando cada diálogo. No puedo hacer suficiente énfasis en lo clave que es esto. Las personas que controlan el examen te van a proporcionar papel en blanco para que puedas tomar apuntes. Asegúrate de pedir montones de hojas, ya que las anotaciones que hagas serán tu mejor aliado para responder esta sección.


En conclusión: ¡¡¡¡toma notas cuando escuches los audios!!!!


Espera… ¿3 audios extra?


Nuevamente, nuestros amigos del ETS decidieron que pueden seguir experimentando con nosotros para crear sus exámenes y evaluar audios y preguntas con el objetivo de saber si funcionan como sistema de medición.


Por lo tanto, existe la posibilidad que, en vez de 6, tengas que responder a 9 audios. No es mentira: serían 9 pruebas de escucha que van a exigir tu total concentración, ya que no sabes con exactitud cuáles de ellas van a ser tenidas en cuenta para el resultado final (toman en cuenta 6 de las 9). Eso significa que esta sección puede durar 90 minutos en vez de 60, y tener 51 preguntas de selección múltiple en vez de 34.


La “buena noticia”

¿Recuerdas que existe la posibilidad que salga una lectura comodín en la sección de lectura? La buena noticia es que, si tienes que hacer una cuarta lectura, entonces no vas a tener que hacer 3 pruebas extra de comprensión auditiva. Si por el contrario solo te salieron 3 lecturas, entonces prepárate para responder las 9 pruebas de audio.


O es lo uno o lo otro.


Afortunadamente, los que diseñan el examen no son tan crueles como para que en tu TOEFL tengas 4 lecturas y 9 audios. Esto sería demasiado material teniendo en cuenta que tienes que responder dos secciones más.
En ocasiones, algunos alumnos me cuentan que estuvieron de buenas y no les salió ni la cuarta lectura ni los 3 audios extras, pero esa no es la norma.


III. Speaking: expresión oral.


Una vez termines de responder la sección de comprensión auditiva, tienes un receso de 10 minutos. Es importante aprovecharlo, ya que continuarás con dos secciones de igual nivel de exigencia que las anteriores.


La parte de conversación consiste en 6 preguntas que se responden contra el computador; es decir, el alumno no habla con ninguna persona, sino directamente a un micrófono. Los audios de las respuestas quedan grabados y los empleados del ETS los corrigen teniendo como criterio que se responda la pregunta correctamente, que la pronunciación no se interponga ante la respuesta, y que la persona no cometa errores que desvíen el entendimiento.

Ellos tienen en cuenta que estás hablando contra el reloj y que probablemente tengas nervios. Por eso, unas cuantas muletillas como “emmm”, “mmm” o repeticiones de palabras no son tan graves. Lo clave es que respondas directamente lo que te están preguntando y que lo hagas dentro del tiempo que te asignan.

Es muy común que las personas que hablamos español seamos poéticos y nos vayamos por las ramas al momento de dar una respuesta. El TOEFL no es el momento. Responde lo que te piden y profundiza en el porqué y los detalles de la respuesta.


¿Cuáles son las pruebas de la parte de expresión oral?


Inicialmente, tienes una pregunta abiertas sobre temas personales. Por ejemplo:



Some people prefer to live in a big city, other people live in a small town. Which do you prefer and why? Give reasons and examples? (Algunos prefieren vivir en una ciudad grande; otros, en un pueblo pequeño, ¿cuál prefieres y por qué?).

Tienes 15 segundos para preparar la respuesta después de haber escuchado la pregunta, y 45 segundos más para responder. Asegúrate de utilizar la mayor parte de los 45 segundos para dar tu respuesta. Debes buscar que la grabación no te corte, pero tampoco debes parar de hablar muy pronto en el tiempo. Terminar tu respuesta cuando faltan 10 segundos antes de que finalice el tiempo no es buena práctica porque dejas un silencio incómodo que transmite la idea de que no tienes suficiente inglés para responder en el tiempo que te asignan.


Las otras 3 preguntas de la sección integran varias habilidades lingüísticas. Una prueba puede involucrar una pequeña lectura, un audio, y luego una pregunta sobre el tema que leíste y escuchaste. Por ejemplo, tienes 45 segundos para leer el texto sobre una nueva política que la administración de la universidad introdujo con respecto al servicio de cafeterías para estudiantes y facultad. Luego, escuchas a una alumna discutiendo con un compañero sus discrepancias con respecto a esta política. Finalmente, tienes que responder una pregunta sobre la opinión de la alumna con respecto a la nueva política, explicando por qué ella piensa de esa manera; es decir, especificando los detalles que ella da para argumentar su posición.

Tomar notas también es clave en esta sección. Sin ellas vas a ser un esclavo de la memoria en un contexto en el que debes tener todas las antenas puestas.


¡Las notas son tu mejor aliado!


Otros tipos de ejercicios involucran audios de una clase magistral, y debes responder una pregunta sobre la explicación que da el profesor; o bien escuchas una conversación entre dos alumnos en la cual uno de ellos comenta sobre un problema personal o académico y el compañero ofrece dos soluciones, y tu labor es señalar cuál es el problema, cuáles son las soluciones y dar tu opinión sobre la solución que consideras mejor y por qué.

Recuerda, por un lado, que en estas últimas 4 pruebas orales tienes 30 segundos para preparar la respuesta (después de la lectura y el audio), y 60 segundos para responder; y, por otro lado, que eres tú frente al computador, y que tomar notas es la clave para el éxito de esta prueba.


IV. Writing: habilidad escrita.

Ya cuando el examen está a punto de terminar, cuando llevas más de dos horas en un ejercicio de concentración, inglés y tensión, tienes que dar lo mejor de ti en la última sección del TOEFL: expresión escrita.

Esta sección dura 50 minutos y requiere que escribas dos ensayos: uno que integra una lectura, un audio y una pregunta para resolver, llamado INTEGRATED ESSAY (Integrated porque integra tres habilidades: leer, entender y escribir); y otro ensayo que pide tu opinión con respecto a un tema de reflexión como Do young people have more fun than older people? What do you think and why? (¿Crees que la gente joven tiene más diversión que la gente mayor? ¿Qué piensas y por qué?). Como este segundo ensayo requiere de tu opinión personal, y es independiente de otros audios y lecturas, se le conoce como el INDEPENDENT ESSAY.

La prueba del INTEGRATED ESSAY está diseñada para ser respondida en 20 minutos (que inician una vez termina el audio). Una respuesta apropiada debe tener entre 150 y 225 palabras.

Los 30 minutos restantes son para que escribas el INDEPENDENT ESSAY. Una respuesta apropiada para este ensayo debe tener como mínimo 300 palabras y un máximo de 400, ya que tienes que reservar tiempo para revisar ambos escritos y corregir errores de ortografía y gramática.

Suena la campana…


El TOEFL es un examen que requiere de mucha concentración mental y hasta de buen estado físico. Lo más importante es conocer el examen a fondo, saber el tipo de preguntas que te van a hacer, y estar preparado para responderlas de la mejor manera. El TOEFL no es un examen que mida tus conocimientos de gramática en inglés; mide tus habilidades en el idioma, y por eso es primordial tener como mínimo un nivel de inglés B1 (estándar del Marco Común Europeo) para responder el examen con relativa comodidad.

Al final del día estamos ante un examen de estrategia.

En el próximo capítulo de esta pelea entraremos a analizar la prueba del IELTS y evaluaremos cuál es el examen que más te conviene tomar.

¿Qué preguntas tienes con respecto al TOEFL? ¿Has presentado este examen antes? ¿Cómo fue tu experiencia? ¿Quieres ayuda para prepararte? ¿Quieres saber si es preferible tomar el IELTS? No dudes en dejarnos un comentario al respecto.